
¡Qué emoción estar de vuelta! La vida ha dado un giro y ahora estoy viviendo en la montaña. Sí, sí, la que siempre prefería la playa. Bueno, he tenido que adaptarme, y aunque estoy cansada y desubicada, mi perro está feliz, así que todo vale la pena.
Hoy quiero hablarles sobre algo que ha cobrado importancia para mí en este nuevo entorno: la propiocepción. ¿Sabes qué es? Es básicamente la conciencia de la posición de tu cuerpo y la capacidad de utilizar ciertos músculos para mantener el equilibrio. Y créanme, vivir en una casa en una colina es todo un desafío propioceptivo.
Voy a compartir cómo replicar la naturaleza en el paseo de tu perro, buscando terrenos inclinados, escaleras y obstáculos naturales. No se trata solo de hacer ejercicio, sino de enriquecer su experiencia y fortalecer esas patitas.
Y hablando de fortaleza, mudarse con un perro es toda una aventura. Valoro más que nunca su felicidad en la nueva casa. Él no quiere salir de aquí, y aunque me moja y se ensucia en el río cercano, lo veo tan feliz que todo cobra sentido.
Te invito a darle al me gusta, compartir y ayudarme a llegar a más perretes. Juntos, cambiemos el mundo para nuestros amigos peludos. ¡Adiós! 🐾💖
Suscríbete a mi Newsletter Newsletter
Si aprendes con el podcast, mis cursos te van a cambiar la vida y van a hacer muy feliz a tu perrete Cursos educación canina
Sigue aprendiendo en mi web xilas.es