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¡Hola a todos y bienvenidos al episodio número 309 de «Hablemos de Perretes»! Soy Sonia Losada, y en este podcast estoy aquí para ayudarte a entender, educar y conocer mejor a tu perro. Quiero eliminar ese “pero” de la frase “mi perro es muy bueno, pero…”, para que podamos decir con orgullo: “mi perro es muy bueno” y punto. Porque sí, todos los perritos son buenos, solo que a veces necesitan un poco de ayuda para solucionar problemitas de comportamiento y así convertirse en perros absolutamente perfectos. Hoy quiero hablarles sobre un concepto que vi hace tiempo: una herramienta para cada perro. No recuerdo exactamente dónde lo vi, pero la idea me pareció tan maravillosa que decidí compartirla con ustedes. Quiero que entendamos juntos por qué es fundamental adaptar las herramientas a las necesidades de cada perro. A veces, pensamos que un perro grande necesita un trato más duro que un perro pequeño, pero esto no es así. Un perro no debería llevar un collar de ahogo solo por su tamaño o fuerza. No porque un perro sea grande debemos usar métodos agresivos como el castigo o la intimidación. Todos los perros, ya sean Malinois o Malteses, merecen el mismo respeto y cuidado. Yo trabajo con todos los perros de la misma manera, independientemente de su tamaño o raza. Utilizo arneses en lugar de collares de ahogo, y nunca recurro al castigo físico. Cada perro es único, sí, pero la filosofía debe ser la misma: trabajar siempre de forma amable y respetuosa. Recuerdo cuando me saqué mi primera titulación y veía cómo a un Bulldog Francés le ponían collar de ahogo. En ese entonces no se sabía tanto sobre el daño que esto podía causar. Ahora, con más información y experiencia, sé que todos los perros deben ser tratados con la misma delicadeza, sin importar su tamaño. Los perros de trabajo, como los Malinois, necesitan más actividad mental y física, pero eso no justifica el uso de métodos agresivos. Todos los perros, ya sean pequeños o grandes, merecen ser educados con amor y paciencia. Yo siempre opto por el arnés y la correa larga, permitiendo que el perro explore y disfrute de sus paseos. Es importante recordar que si necesitas usar métodos agresivos para controlar a un perro grande, es porque no estás trabajando de manera adecuada. Hay que estudiar, aprender y adaptarse, pero siempre con respeto y cariño hacia el animal. Si te ha gustado este episodio, te invito a suscribirte a mi newsletter en mi página web [tu página] y seguirme en redes sociales para más consejos y actualizaciones. Mis cursos se abren y cierran según la demanda, así que mantente atento para no perderte nada. Por último, si te ha gustado este episodio, por favor dame cinco estrellitas en Spotify, iVoox o donde sea que me escuches. Y si conoces a alguien que tenga un perro y pueda beneficiarse de este consejo, comparte este episodio con ellos. Gracias por escucharme hoy. ¡Nos escuchamos en el próximo episodio! ¡Adiós!